-Moraleja-dijo el narrador-: la locura es una flor en llamas. O en otras palabras, es imposible inflamar las cenizas muertas, frías, viscosas, inútiles y pecaminosas de la sensatez.

Angela Gorodischer
en La resurrección de la carne.

26.9.11

el estilo de la muerte

Voy a ocultarme en el lenguaje.( ella, yo)

La libertad absoluta y el terror.( un amigo)

Tenía facilidad para seducir ,  pero cierta dificultad para mantener las relaciones...

Se fascinaba inmediatamente con la gente y apasionadamente ,y eso puede ser abrumador, resultaba muy demandante.( una amiga)

Me separé de todos o me marginaron, como se trata de todos no puedo decir que haya culpables. No tengo con quien hablar. Y para qué seguir embelleciendo mi casa si nadie viene a verme. Ni siquiera Olga  es sensible a esta soledad mortal puesto que no me llama. Qué sucede ? soy yo? o son ellos? ( ella , yo)

El súbito desbandarse de las niñas que fui. (ella, yo)

No sabíamos que ella podía haber llegado a lo que  llegó.( su hermana)

Mi muy Julio, en el hospital aprendo a convivir con los 
ultimos deshechos, mi mejor amiga es una sirvienta de 18 años que mató a su hijo... ( A Cortázar)
Aquí nevó anoche y es un día para no moverse de casa, para inventar ceremonias de interior...
(Cortázar)

21.9.11

Primavera

La rebelión consiste en mirar una rosa
hasta pulverizarse los ojos
Alejandra Pizarnik



Me despierta el grito enérgico de los adolescentes
júbilo e histeria
contentos de nada agrupados 
festejando la primavera
reunidos en parques en calles
las risas prontas
sin razón
expulsadas como la rabia del pobre
así 
de repente 
sin juicio de lugar
sin juicio.

Le abro la puerta a la gata
que espera quieta del otro lado
agradece el gesto con un maullido corto
y andar sereno
come y vuelve
a frotar sus orejas contra mis pie
mi otro pie.

Escucho profundamente
casi en cuclillas 
el sonido de este silencio tan gordo
tan lleno de polvo 
de libros
de historias que hablan sin dejar de contar
ni un  minuto 
una y otra vez sus hitos
una y otra vez.

Me siento y miro
por la ventana veo la ventana de enfrente
un poco más arriba más allá
recibe el sol que se pone
dejando el primer día de la primavera casi atrás
atrás.

Mi padre miraba esa misma ventana
día tras día
le gustaba ver el sol poniéndose ahí
las nubes gordas de la lluvia
los pájaros volando atravesados por la cortina
mientras repetía un dicho de mi abuela
siempre llega el tiempo en que un día no es un día.
Un día, un año.









las pinturas pertenecen a la última serie
Variaciones del calendario

20.9.11

Viva Sartre

Por qué no sos feliz ? preguntó Adriá,
yo estaría orgulloso con tu vida
y se fue tocando la guitarra
a descubrir el mundo que yo ya descubrí.

Por qué no tiene sentido? preguntó el doc,
usted existe y puede hacer lo que quiere
y me dio un turno
para la próxima semana el día martes.

Por qué vas a llorar? se adelantó Balta,
no me gusta cuando estás triste
y me abrazó tan grande
como yo cuando él era bebé.

Entonces, después de dos años
volví a pintar.




















La serie se llama Recuerdos de Lanzarote.

14.9.11

Salidas nocturnas






No tengo ganas de salir. Meterme en el afuera.

Simular que río o me entusiasmo me deja más sola, más enterrada al volver.

Casi siempre me detengo en cosas que nadie comparte, a nadie interesan.
Marcan, como la orina del gato, un territorio. El pozo ciego, el puente levadizo cerrado.

Nada me da risa ni broto en llanto. Me decepciono al buscar una conmoción que sé, no sucede sino a veces, muy de vez en cuando, diría años de años. 

Entonces no espero, no tengo ganas de hablar, ni bailar en la peña de universitarios, ni comer empanadas aunque prometan , ni brindar con vasos grasientos, tomar frío, pasar calor, trasladarme sacudida en un colectivo.

Deje atrás el asombro, atrás la búsqueda, la esperanza.

Cuando llega la noche y la fatiga diurna se ablanda, se abren bien mis ojos mirando hacia adentro. Me encuentro. En las palabras que escribo, en las  impresas por otros, en películas con protagonistas a quienes siento como hermanos de sangre. 

Veo mi vida, conecto mi memoria, me vuelvo redonda, completa. 

También me gusta el silencio de las charlas chocando en la madrugada de la cocina, el ruido del fuego calentando el agua, la luz amarilla en las miradas.

Y después viene el sueño, revelador de ricos universos. El reencuentro con las personas que quiero o quise, quienes tal vez no fueron contemporáneas, pero las conjugo, me sorprende ver cómo dialogan, interactúan . 

Me divierte ver lo que no pude vivir y el onírico destino de mis vivencias, sucediendo todo junto en un acto, lejos del mundo que dicen real, del ruido de risas forzadas ,de bailes con jóvenes universitarios, quienes todavía creen en su inmortalidad. Ellos tienen tiempo para desperdiciar. Creen que el amor los completará. Buscan entonces una caricia, un consuelo, una mano que los guíe y les dé vueltas para marearse de momentos alegres, los cuales, casi siempre , confunden con la felicidad.

5.9.11

Un pequeño esfuerzo


No anda la tecla del acento
debe ser que no lo necesito hoy.

Quisera hablar de la luz roja
la bella luz roja que me acompaña
en la tarde que va cayendo
como el invierno
pero me da miedo la llegada de la primavera
claro que es bella claro
claro que es perfumada claro
el amor
los estudiantes
las horas largas
y todo eso
estoy de acuerdo
pero necesito noche para escribir
necesito adentro
silencio
cueva
muda
escuchando mis palabras
convertidas en letras que saltan
se acomodan en la pantalla
sin poder manejarlas
controlarlas
recuerdo una foto
no beber de la botella de la angustia
recuerdo una peli
no caer en el pantano de tristeza

no hay tildes en este escrito
las palabras por esta vez me hicieron caso
y por ellas
solamente por ellas
no me sirvo de la botella
y huelo el aire de primavera.

La pintura se llama Primavera, la hice hace bastante tiempo ya.